CINE PORTUGUÉS: CICLO DE MAYO, EN LA CAYETANO HEREDIA
Cineclub de la Cayetano Heredia.- Lunes. 7 de la noche. Av. Armendáriz 445, Miraflores. Entrada Libre.
Casa de Lava, de Pedro Costa (1994, 95'). La cotidianidad exacerbada y la pobreza conviven con un misterio impenetrable. Un hombre en coma. Una joven enfermera que se consagra a él. Un viaje a Cabo Verde. Remake excéntrico de I walked with a zombie (1943). Inquietante, desasosegante; como el clásico de Jacques Tourneur.
Lunes 9 de Mayo:
Odete, de Joao Pedro Rodrigues (2005, 97'). Sensible, autoconsciente, formalista, carnal; trufada de citas a lo mejor de la tradición del melodrama desgarrador y helado: Sirk, Fassbinder. Guiños a Vertigo y a Breakfast at Tiffanny's. Desear imposibles y fantasmas como nuestra ocupación favorita.
Odete, de Joao Pedro Rodrigues (2005, 97'). Sensible, autoconsciente, formalista, carnal; trufada de citas a lo mejor de la tradición del melodrama desgarrador y helado: Sirk, Fassbinder. Guiños a Vertigo y a Breakfast at Tiffanny's. Desear imposibles y fantasmas como nuestra ocupación favorita.
Lunes 16 de Mayo:
La Comedia de Dios, de Joao César Monteiro (2005, 162'). Pocos, muy pocos, tan exquisita y delicadamente transgresores como Monteiro. La elegancia inigualable de su cine, la sabiduría morosa y sensual de sus dilatadas e hipnóticas escenas, configuran una experiencia que eleva, deleita, satisface y perturba.
Lunes 23 de Mayo:
Singularidades de una chica rubia, de Manoel de Oliveira (2009, 64'). Locuacidad expresiva del cine silente. Fuerza simbólica del clasicismo. Travesía por las efervescencias del amor platónico y denodada lucha contra las rigideces sociales y las ironías infaltables y abundantes del Destino.
La Comedia de Dios, de Joao César Monteiro (2005, 162'). Pocos, muy pocos, tan exquisita y delicadamente transgresores como Monteiro. La elegancia inigualable de su cine, la sabiduría morosa y sensual de sus dilatadas e hipnóticas escenas, configuran una experiencia que eleva, deleita, satisface y perturba.
Lunes 23 de Mayo:
Singularidades de una chica rubia, de Manoel de Oliveira (2009, 64'). Locuacidad expresiva del cine silente. Fuerza simbólica del clasicismo. Travesía por las efervescencias del amor platónico y denodada lucha contra las rigideces sociales y las ironías infaltables y abundantes del Destino.
Alice, de Marco Martins (2005, 102'). 193 días. Ella no apaprece. Él hace cada día el idéntico recorrido que hizo su hija la última vez. Como no la encuentra instala cámaras de seguimiento. En medio de la multitud debe de aparecer alguna vez un signo, un rastro, alguna señal...
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