LA CINEFILIA NO ES PATRIOTA

DEDICADO AL CINE PERUANO QUE AÚN NO EXISTE

Thursday, August 20, 2009

RABIOSO, SOL, RABIOSO CIELO (2009), DE JULIÁN HERNÁNDEZ


*Película vista en el XIII Festival de Lima*
El amor (se sabe) es un tema intratable, muy tratado –mal-tratado, muy mal-tratado–, en el cine; tal vez –entre otras oscuras razones– lo sea porque parece ir solo, no parece ir acompañado de un verdadero amor al cine. En efecto: ¿cuántos de los que hacen películas saben lo que es el cine; en efecto, cuántos hacen cine? Me pregunto esto necesariamente, al ver tantas películas que no me dicen nada, o muy poco, que fugazmente me emocionarán en cuanto ‘espectador corriente’, pero que son echadas al fuego del olvido, desde su concepción inicial, por la memoria del cine. Imágenes e historias que no dejan una huella… Pero aquí, en cambio, veo a un artista. Veo una ambición, una apetencia de algo que todavía puede llamarse 'cine puro'. Me pregunto si Rabioso Sol, Rabioso Cielo es un tratado sobre el amor; o si tal vez lo es más bien sobre el vía crucis desesperado que lleva (o no) milagrosamente hasta él; sobre cuerpos que se juegan la vida, en rincones y oscuridades; contemplados con una mirada comprensiva y compasiva, si se quiere, divina, no negando pero sí trascendiendo la complacencia voyeurista. Lo que sé por experiencia es que la potencia onírica de sus mejores imágenes y sonidos, el despliegue de recursos, exquisito, que es casi constante, prueba sobradamente que esta película es una declaración inequívoca, consciente y apasionada, de amor al cine. Importa mucho, a la vez que no importa demasiado la orientación sexual de sus personajes; salvo aparentes códigos cifrados (ejemplo: la negación de un beso, la invitación a deslizarse más abajo), y la presencia de la mujer, al principio inesperada, en esa primera media hora (del corte de poco más de dos horas que pude ver) que me hipnotiza, es puro goce sensorial, transporte de los sentidos hacia otro mundo (¿y qué más se puede pedir?), cruce magnífico de relato mítico, registro documental, melodrama desacelerado, cine de atmósferas y de texturas, hecho de sutiles e intensas sensaciones que no requieren de explicaciones, de palabras; película romántica, erótica, y sí, como lo oyen, cine religioso. El bello final a color, aquietante y conmovedor: recuperación del paraíso perdido buscado a través de purgatorios e infiernos, así lo deja en claro.
(M.C.)
La Cinefilia no es patriota

3 Comments:

  • At 3:59 PM, Anonymous Anonymous said…

    ¿Por qué sostiene usted que el amor es un tema mal-tratado por el cine? Antes de afirmar eso debería definir qué entiende por la palabra amor. ¿Es sólo un concepto, acaso un sentimiento creado por la mente o el corazón, o algo inexplicable? Hay que tener cuidado para decir que sólo puede tratar el tema del amor un cineasta que "sienta amor por el cine". ¿O acaso pretende insinuar que el mexicano Julián Hérnández es el elegido? Demasiado esnobismo de su parte, señor.

     
  • At 10:51 AM, Blogger La cinefilia no es patriota said…

    Hola. Gracias por escribir.

    No intentaré una nueva versión de 'El arte de amar', de Erich Fromm. Ni tampoco de la obra de Reich.

    ...También me referí a que era un tema 'intratable', intentando referirme así a lo contradictorio y misterioso que es este
    'sentimiento'.

    Asimismo, me pregunté en el texto si más que una película sobre el amor, era una película sobre su búsqueda.

    Tratado mal, sí: me refería a que en las películas se ve su comienzo, su crisis o su final, pero no su desarrollo, su florecimiento, suéxito, su fortalecimiento, cosa que indudablemente existe.

    Escribí que de lo que estaba seguro es que Rabioso Sol... era una declaración de amor al cine.

    Pregunté por esa película que fuese tanto un tratado sobre el amor como una declaración de amor al cine. No existe.

    Tuve la fortuna de ver 19 de las 20películas de la Categoría Ficción Competencia del Festival de Lima (no vi Illary), y debo decir, que lo que hace Julián Hernández marca una diferencia con todo lo demás; Huacho es la otra película que brilla con luz propia en el conjunto.

    No siempre lo logra en esta película, pero hay varios momentos y largos minutos en los que para mí Rabioso Sol... revela a un poeta de la imagen.

    En este blog esperamos ver la versión original de 3 horas, para seguir hablando de esta bella película.

    Si pedirle al cine lo máximo que puede dar COMO ARTE es snob...

    En todo caso, al menos yo, prefiero a los que intentan ser artistas, aún cuando no siempre lo logren, por encima de aquellos que ni siquiera lo intentan.


    M.C.

     
  • At 6:07 AM, Anonymous Anonymous said…

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