HOMERO-BUSH-WARNER O EL MISTERIOSO Y RISIBLE CASO DE LAS TRANSNACIONALES

Hace unos días, varios de nosotros, críticos de cine y periodistas cinematográficos, recibimos un mail mágico y lleno de color, que podría ser descrito, en rigor, como una “invitación amenazante” -extraña ensambladura de un sustantivo con un adjetivo- que a mí me pareció altamente cómica, con motivo de la función de prensa de Harry Potter y El Misterio del Príncipe. La cosa era: ya pues, llena tu fichita. Aquí la fichita. (La copio respetando escrupulosamente todas sus ‘particularidades idiomáticas’).

ACUERDO DE SEGURIDAD Y CONFIDENCIALIDAD




El señor (la señora)___________________________________ representante de ______________________ accede a cumplir con los requerimientos indicados por Warner Bros. Pictures y sus representantes en Lima.

No se permitirá el ingreso a la sala de cámaras ni celulares. Sugerimos dejarlos en casa o en el auto.
Al asistir al evento usted acepta las condiciones y restricciones de seguridad que se tomarán para su realización. La proyección será monitoreada para evitar la grabación parcial o total; De darse el caso de encontrar a un invitado grabando o fotografiando la película, éste será retirado de la sala y presentado a las autoridades respectivas.

Contaremos con la presencia de la Policia Nacional del Perú, de efectivos de una empresa de Seguridad, contamos con equipos de alta tecnología para impedir grabaciones ilícitas y haremos valer la nueva ley de Arresto Ciudadano por lo que les recomendamos seguir nuestras indicaciones y disfrutar la película.



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Firma



Naturalmente esto parece un chiste, pero lo mejor (o lo peor) de todo es que no lo es en lo absoluto. ¿Qué rayos se han creído estos tipos? ¿No sería más efectivo que los Señores instalaran una Base Militar Portátil o desnudaran en fila india a todos los críticos de cine y los periodistas cinematográficos cual campo de concentración –o, digamos, Guantánamo, para mencionar un ejemplo que les es más próximo- a la entrada del cine? Pero claro, esto no es otra cosa que Bush, ¿no?; en lenguaje transnacional / internacional / neoliberal / neocon / neonazi... y altamente globalizado y tecnologizado.

La función empezó hoy, lunes, a las 10 de la mañana en el Cineplanet Alcázar… y ¡horrible oye!: chamba es chamba, como dicen por ahí, y qué desgracia, digo yo, pues imagino que algunas personas no han tenido alternativa, pero no creo ni por un momento que se sientan bien quienes hayan ido en semejantes condiciones, evidentemente indignantes y por completo humillantes.

Eso sí: recomendamos a los altos ejecutivos de tan digna empresa revisar milimétricamente al personal de limpieza del cine, pues no vaya a ser que cuenten con microcámaras en la punta del trapeador o en algún hilo colgando desapercibidamente de sus gorritos. Beware! Ah, y a que no saben chicos, hay un nuevo pop corn sintético que graba películas con calidad de dvd… ¡Aplasten a martillazos todo el pop corn! ¡Revisen las deposiciones de los asistentes con rayos infrarrojos, no vaya a ser que por ahí se les escape su Harry Potter!

Y, sobre todo, disfruten la película.


M.C.


La Cinefilia no es patriota