NOCHE DE PAZ, NOCHE DE AMOR: LO MEJOR DEL AÑO FUERON... LOS DESNUDOS DE JULIETTE BINOCHE EN PLAYBOY

31 de diciembre. 11 de la noche.

Pienso en el año que ya fue mientras en el DVD corre Les Glaneurs et la Glaneuse de Agnès Varda. Cada vez que llega diciembre viene la pesadilla: los balances cinematográficos. “Que la cartelera comercial es una mierda, que el ‘circuito cultural es mejor’”, y bla bla bla. Pregunto si será posible cambiar de modelo para los recuentos en la próxima oportunidad. ¿Será factible?

En todo caso, sí Mario, coincido contigo en que lo mejor fue Caché, aunque el circuito paralelo nos trajo cada cosita, que daba sana envidia, y confirmaba la sensación de que más allá de nuestras fronteras el cine exuda, en más de un caso, una vitalidad alucinante.

Como sea, ya que todos han dicho esta boca es mía en cuanto a los balances cinematográficos –que faltaron verse pegados o escritos hasta en las paredes de los baños–, quiero hacer mención de lo que, personalmente, significó uno de los hechos más generosos del 2007: ver calata a Juliette Binoche a sus cuarenta y tantos años en Playboy. Creo que este fue el mejor regalo de navidad que recibí, y adelantado además.

En vez de amargarme más la vida pensando que todo es una mierda en la cartelera comercial –hecho resabido, por lo demás, y que va a empeorar en los siguiente años, pienso–, mi cerebro se relaja observando las pálidas mollejitas de Juliette...

Nada más... Estoy a punto de irme a la cama, y me espera Damage, de Louis Malle, quiero dormirme esta noche con una última imagen: el rostro de Juliette Binoche...

Alonso Izaguirre

LA CINEFILIA NO ES PATRIOTA