UNA LOCURA DE HERZOG, HOY (7PM) EN LA CAYETANO HEREDIA
Herz Aus Glas (Corazón de Cristal).
“Debo decir que estuve interesado en la hipnosis por la forma en que puede ser usada en términos de estilización. Probamos cerca de 450 personas para escoger a las que pudieran ser hipnotizadas en condiciones difíciles, bajo los reflectores y con mucha actividad a su alrededor. Y tenían que estar profundamente hipnotizadas, a tal grado que pudiesen abrir los ojos sin despertar. La sensación óptima de trance se reclama también del espectador, para emprender exploraciones juntos.”
(…) La verdadera fuerza del cine radica en que se trabaja con la realidad de los sueños. Cuando uno va a acostarse no planea tener tal sueño, tal estructura… Las secuencias de mis filmes carecen de lógica dentro del contexto. Son series irregulares de imágenes. Puede haber quizás una lógica interna, pero no una lógica matemática. Muchas veces no hay tránsitos lógicos, pero sé que ahí está la esencia del filme y que incluso nace de esa falta de lógica. En lo particular, prefiero la acción viva: dar a los espectadores imágenes no vistas antes. La lógica y la psicología no son siempre necesarias ni obligatorias.
(…) No son solo mis sueños. Yo creo que todos estos sueños son también de ustedes. La única diferencia entre ustedes y yo es que yo puedo articularlos. Y eso es de lo que se trata la poesía, o la pintura, o la literatura, o la cinematografía. Yo hago cine porque no he aprendido a hacer otra cosa. Hasta cierto grado, es todo lo que sé hacer. Y es mi obligación, porque ésta es quizás la crónica interna de quiénes somos, y somos nosotros quienes debemos articularla. Si no, seríamos como vacas en el campo.
Werner Herzog
Ciclo Retratos de Obsesiones:
http://lacinefilianoespatriota.blogspot.com/2008/04/ciclo-retratos-de-obsesiones.html“Debo decir que estuve interesado en la hipnosis por la forma en que puede ser usada en términos de estilización. Probamos cerca de 450 personas para escoger a las que pudieran ser hipnotizadas en condiciones difíciles, bajo los reflectores y con mucha actividad a su alrededor. Y tenían que estar profundamente hipnotizadas, a tal grado que pudiesen abrir los ojos sin despertar. La sensación óptima de trance se reclama también del espectador, para emprender exploraciones juntos.”
(…) La verdadera fuerza del cine radica en que se trabaja con la realidad de los sueños. Cuando uno va a acostarse no planea tener tal sueño, tal estructura… Las secuencias de mis filmes carecen de lógica dentro del contexto. Son series irregulares de imágenes. Puede haber quizás una lógica interna, pero no una lógica matemática. Muchas veces no hay tránsitos lógicos, pero sé que ahí está la esencia del filme y que incluso nace de esa falta de lógica. En lo particular, prefiero la acción viva: dar a los espectadores imágenes no vistas antes. La lógica y la psicología no son siempre necesarias ni obligatorias.
(…) No son solo mis sueños. Yo creo que todos estos sueños son también de ustedes. La única diferencia entre ustedes y yo es que yo puedo articularlos. Y eso es de lo que se trata la poesía, o la pintura, o la literatura, o la cinematografía. Yo hago cine porque no he aprendido a hacer otra cosa. Hasta cierto grado, es todo lo que sé hacer. Y es mi obligación, porque ésta es quizás la crónica interna de quiénes somos, y somos nosotros quienes debemos articularla. Si no, seríamos como vacas en el campo.
Werner Herzog
Ciclo Retratos de Obsesiones:
La Cinefilia No Es Patriota
1 Comments:
At 8:36 PM, La cinefilia no es patriota said…
Oops, me olvidé de subir esta frase de Herzog, aprovéchenla si pueden:
"Lo que pasa simplemente es que solo quedan pocas imágenes. Cuando miro aquí afuera, todo está edificado, las imágenes no tienen espacio. Uno tiene que excavar como un arqueólogo para encontrar algo en este paisaje herido. Necesitamos imágenes que correspondan a nuestro estado de civilización y a nuestro profundo interior. Me iría a Marte si fuera necesario para encontrar imágenes puras, ya que en esta tierra no es fácil encontrarlas.
Comentario en Tokio-Ga, de Wim Wenders
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